Alcanzando metas más altas.
Tras graduarse en la universidad, Alison siguió superándose. Se fijó metas claras manteniendo un régimen de entrenamiento riguroso y bien pensado. También alcanzó ese objetivo y saltó con éxito ¡4,3 metros! Alison redujo entonces sus criterios a los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Sin embargo, para ello era imprescindible clasificarse. En las competiciones posteriores estableció marcas personales y alcanzó el nivel olímpico. Finalmente se clasificó para las Olimpiadas.
Resultado decepcionante
En su afán por clasificarse para los Juegos Olímpicos, Alison Stookey se entrenó más duro que nunca, pero por desgracia sus esfuerzos se saldaron con una gran decepción. Perdió por poco la oportunidad de competir en las pruebas olímpicas de EE.UU. para los Juegos de Londres 2012. Al igual que otros 12 candidatos, no consiguió batir el récord estándar necesario para clasificarse para los Juegos. Aunque ya tenía un récord de más de 4,2 metros, la presión de la competición pareció vencerla. Su sueño de competir en los Juegos Olímpicos se truncó aquí.